Características de la práctica de hatha yoga en el primer trimestre
Al practicar yoga para embarazadas en el primer trimestre, mientras el cuerpo aún se está adaptando a esta nueva condición, es importante excluir de la práctica las asanas que ejercen presión sobre el abdomen. Las yoguis experimentadas deben realizar con cautela las asanas de fuerza, y las principiantes deben escuchar a su cuerpo y evitar cualquier postura que cause el más mínimo malestar. Es mejor practicar poco, pero todos los días. También, se debe reducir el tiempo de permanencia en las asanas y no incluir posturas de pie en la rutina si hay siquiera la menor amenaza de aborto espontáneo.

7 asanas de yoga en el primer trimestre
Savasana
Para entrar en Shavasana, uno se acuesta sobre la espalda, con los brazos estirados a lo largo del cuerpo y las palmas hacia arriba. Luego, mentalmente, se debe hacer un seguimiento del relajamiento secuencial de todos los músculos. La postura de descanso total ayudará a lograr armonía y equilibrio, aliviar el cansancio y reducir el nivel de ansiedad. La simplicidad de realizar Shavasana es aparente. Relajar completamente todo el cuerpo es una tarea difícil, pero la práctica regular de esta asana permite alcanzar los resultados deseados.

Supta Virasana
La asana del héroe realizada sobre la espalda es una de las posturas que alivia las náuseas, por lo que se encuentra bastante a menudo en los complejos de yoga para embarazadas en las primeras etapas. La base para su ejecución es la virasana estándar. Desde esta posición inicial, apoyándose con los codos en el suelo, se debe inclinar hacia atrás y cuidadosamente colocar la cabeza y luego la espalda en el suelo. Luego, sin despegar los omóplatos de la superficie, estirar los brazos hacia arriba. A los principiantes que les resulte difícil realizar la versión tradicional no deben abstenerse de incluir la asana en los complejos: se puede facilitar el ejercicio colocando un soporte (cojín o almohadilla) bajo la espalda.

Gomukhasana en Virasana
Otra postura realizada desde la postura del héroe. Sentado en virasana (es más cómodo sentarse en un ladrillo especial en lugar del suelo), se deben entrelazar los dedos detrás de la espalda. Un codo queda arriba y el otro abajo. Después de algunos ciclos de respiración, los brazos deben cambiarse. Gomukhasana fortalece la postura, abre bien la caja torácica y reduce las manifestaciones de la toxicidad.

Influyendo positivamente en la función renal y mejorando el equilibrio hormonal, la postura de la serpiente se practica a menudo al inicio del embarazo. Para realizarla, es necesario acostarse boca abajo en el suelo. Luego la parte superior del cuerpo se levanta con el apoyo de las manos, estirando al máximo el cuello. Es importante levantar utilizando la fuerza muscular del torso y no empujando con las manos desde el suelo. Las piernas deben estar juntas y los muslos no deben despegarse del suelo.

Viparita Karani con las piernas contra la pared
El nombre de esta asana a menudo se traduce como la postura de la vela doblada. También se la conoce como la postura del lago invertido. Se puede realizar tanto en el suelo como en la cama. Consiste en una posición acostada sobre la espalda con las piernas elevadas a lo largo de la pared. Para mayor comodidad, se coloca una almohada debajo de la parte baja de la espalda. El principal objetivo de la asana es normalizar la circulación sanguínea en las piernas y la región pélvica. Incluir Viparita Karani en las rutinas de yoga para embarazadas durante el primer trimestre puede reducir significativamente las probabilidades de aparición de varices. Además, esta postura es ideal para la relajación.
Baddha Konasana
Una postura popular que ayuda a equilibrar el funcionamiento del sistema genitourinario, estimula el flujo sanguíneo hacia los órganos pélvicos. Es una excelente preparación del cuerpo para un parto exitoso y una maravillosa prevención contra las várices y el radiculitis. La variante clásica de la asana de la mariposa se realiza sentada. Las rodillas se doblan para acercar los talones lo máximo posible a la zona de la ingle. Los pies se juntan y las rodillas se bajan hacia el suelo hasta donde la flexibilidad lo permita.

Vajrasana
La postura del diamante estabiliza la digestión, reduce la acidez y ayuda a curar enfermedades estomacales. Esta posición se caracteriza por sentarse sobre los talones, o mejor dicho, sobre las superficies internas de los pies. Los dedos gordos están juntos, mientras que los talones están separados y tocan así las partes externas de los muslos. Los ojos deben estar cerrados y el cuerpo relajado. La duración en la asana depende de la experiencia en la práctica, cualquier incomodidad en los tobillos, rodillas o muslos es motivo para terminar el ejercicio.

Hatha Yoga primer trimestre: videolecciones para principiantes
Ayudarán a equilibrar la carga en las clases de yoga para embarazadas en el primer trimestre videos en nuestro sitio web. Aquí hay diferentes conjuntos: algunos están destinados a ejercicios regulares y permiten trabajar todo el cuerpo. Otros están dirigidos a resolver tareas específicas:
• fortalecimiento de los músculos del suelo pélvico;
• aprendizaje de la respiración correcta;
• relajación del cuerpo y preparación para dormir;
• obtención de energía (conjunto de asanas matutinas).
Yoga para embarazadas 1er trimestre: qué se necesita para la práctica en casa
Para una práctica exitosa en casa, las futuras mamás necesitan videos de yoga para embarazadas en el primer trimestre, una colchoneta antideslizante y cómoda, mantas y almohadas o equipos especiales de yoga: bolster y bloques. La habitación debe estar bien ventilada y la ropa no debe limitar los movimientos, además de ser agradable al tacto.