La postura del Abedul en yoga
La postura del Abedul es conocida por todos desde la infancia. Antes solo era divertido, pero hoy sabemos que también es beneficioso. En la práctica del yoga, la Sarvangasana se considera una de las fundamentales:
– reduce el estrés emocional;
– proporciona claridad mental;
– desarrolla el equilibrio y el tono general del cuerpo.
En el artículo consideraremos cómo realizar la postura durante el embarazo en el primer trimestre.
Beneficios de la Sarvangasana
Cuando se realiza correctamente y se integran técnicas de respiración, una mujer durante el embarazo siente el efecto en unos segundos. Mejora el bienestar, desaparece la tensión acumulada y la irritación.
No se puede destacar la influencia de una sola postura en partes específicas del cuerpo, ya que la Sarvangasana afecta a todo el organismo de inmediato. La traducción del nombre al español se escucha como «postura para todas las partes del organismo». Concretamente, los beneficios de Sarvangasana se expresan en:
– mejora del funcionamiento del corazón;
– circulación sanguínea de mayor calidad;
– enriquecimiento de los pulmones con oxígeno;
– normalización del funcionamiento del tracto gastrointestinal.
La postura está indicada para trastornos respiratorios y ayuda parcialmente en la lucha contra la bronquitis y el asma. Concretamente para embarazadas, es una excelente herramienta de prevención contra resfriados y anemia.
La postura del abedul para embarazadas también alivia los dolores de cabeza. Se recomienda practicarla por la tarde antes de dormir para mejorar el sueño y limpiar la mente de pensamientos negativos.

Sarvangasana y técnica
Al realizar la técnica de Sarvangasana, es sumamente importante comprender cómo distribuir el peso para evitar lesiones.
¡Importante! No cargues el cuello y la cabeza, intenta transferir el peso lo máximo posible a los hombros y las manos, que sostienen la espalda.
Entonces, el orden de ejecución de la asana:
- Extiéndete en la esterilla y asegúrate de que el cuerpo esté en una posición recta.
- Comienza a levantar las piernas rectas hasta que estén perpendiculares al suelo.
- Poco a poco despega la pelvis del suelo, y luego la parte baja de la espalda.
- Coloca las palmas de las manos debajo de la parte baja de la espalda; los brazos están doblados en los codos y ayudan a mantener el equilibrio. Si el cuerpo lo permite, intenta «elevarte» más, sosteniéndote la espalda gradualmente con las manos.
Se recomienda permanecer en la postura por más tiempo, pero solo el tiempo que sea cómodo. Si no hay problemas de presión, se puede terminar la postura llevando primero las piernas más allá de la cabeza, «dirigiendo» la sangre aún más al corazón y la cabeza.
Luego salimos suavemente de la postura, no «caemos», no nos soltamos bruscamente. Al bajar las piernas al suelo, se pueden flexionar un poco.
No te levantes bruscamente después de la postura; permanece al menos un rato en la postura de Savasana. Relájate, estira los brazos y las piernas, separándolos ligeramente hacia los lados. Durante este tiempo, restauramos nuevamente la circulación de la sangre «nueva» enriquecida en las extremidades.
Cómo realizar correctamente la postura lo mostramos en detalle en los video tutoriales de «MomsLab».

Sarvangasana y errores en su ejecución
Las personas buscan obtener el máximo de yoga. A veces parece que una carga máxima da más resultados, pero no es así. Ya hemos señalado la principal equivocación: la carga excesiva en el cuello y la cabeza, pero también presten atención a otros riesgos:
– Tratar el yoga como un deporte. Más rápido, más brusco, más fuerte es algo relacionado con todo, ¡pero no con el yoga! Una entrada y salida demasiado brusca de la postura afecta negativamente al cuerpo, especialmente si no está preparado.
– Entrar en la posición con miedo. Si tienes miedo, es mejor no hacerla del todo o pedir a alguien cercano que te «asegure» al principio. Asegúrate de que la superficie debajo de ti sea suave: usa almohadas, cobijas y mantas.
– Ir en contra de tu cuerpo. Si la ásana aún no sale perfectamente, no trates de «forzarte» con fuerza. Cualquier malestar, dolor y sufrimiento es motivo para facilitar la pose o incluso dejar de realizarla.
La postura de Vela en yoga debería sentirse cómoda e incluso agradable. Al menos, lo suficiente como para que puedas mantenerte en ella de 30 segundos a un minuto.

Sarvangasana durante el embarazo
Los métodos enumerados a continuación ayudarán a adaptar la postura de Vela para mujeres embarazadas: reducir la carga en los músculos del abdomen y la espalda.
Nos apoyamos en la pared
Cómo realizar:
– Acuéstate de lado perpendicular a la pared, presiona las piernas contra el torso.
– Gira sobre tu espalda y ahora extiende las piernas hacia arriba, apoyándote en la pared. Sostén la pelvis y la parte baja de la espalda con las manos, y apóyate en el suelo con los codos.
– Puedes dejar las piernas en la pared o intentar mantener una postura recta por tu cuenta. Si es necesario, vuelve a poner las piernas en la pared.
Asegurando soporte para el cuello
Esta técnica es especialmente relevante si durante la postura sientes una fuerte presión en el pecho, falta de aire o tos.
En ese caso, puedes usar una manta enrollada – servirá como apoyo para los omóplatos y codos, «abrirá» espacio para el cuello y facilitará la respiración. La altura de dicho «apoyo» es de unos 5 cm.

Una silla como apoyo para la pelvis
Si sientes que es difícil mantener el equilibrio o hay exceso de peso, toma una silla resistente. Apoya el respaldo contra la pared, y coloca algo suave en el borde del asiento si es necesario. Así, la presión sobre la parte baja de la espalda no será tan fuerte.
Cómo realizar Birch con una silla:
– Siéntate en una silla de cara a la pared.
– Agárrate de la silla y empieza a bajar suavemente la espalda hacia atrás. Doble las piernas delante de ti en las rodillas – puedes engancharlas en el respaldo de la silla.
– Cuando los hombros alcancen un suave apoyo en el suelo, comienza a estirar suavemente las piernas hacia arriba. Coloca las piernas en la pared.
Realiza varios ciclos de respiración en esta posición. Si temes caer, pide a otra persona que te asista y sujete la silla.