Durante el embarazo, el volumen de sangre de la mujer aumenta, lo que conlleva inevitablemente una disminución de la concentración de hemoglobina. Este proceso en sí mismo no se considera una patología, mientras el nivel de hemoglobina se mantenga dentro de los parámetros normales para mujeres embarazadas. Así, en el primer trimestre, un resultado normal sería de 116 a 139 g/l, en el segundo – 97-148 g/l, y en el tercer trimestre los límites se amplían a 95-150 g/l.
Si una mujer con diagnóstico de anemia no toma suplementos minerales ni consume alimentos para elevar la hemoglobina, el embarazo estará acompañado de estados desagradables como fatiga, dolores de cabeza, zumbido en los oídos, mareos, dificultad para respirar, hormigueo en las extremidades.
Para el feto, las consecuencias de la anemia en la madre pueden incluir trastornos mentales y nerviosos. Además, con la disminución del nivel de hemoglobina, aumenta la probabilidad de aborto en cualquier etapa del embarazo.
Los alimentos ricos en hemoglobina son especialmente necesarios para las embarazadas, por lo que conviene considerar su inclusión en la dieta. En primer lugar, se trata de alimentos de origen animal: huevos, hígado, vísceras, moluscos, carne roja. Además, a menudo se utilizan cereales (trigo, maíz, centeno, trigo sarraceno) como alimentos para aumentar la concentración de hemoglobina en la sangre de las embarazadas. Se pueden consumir en forma de cereal, salvado, tortitas y otras formas de presentación.
Entre los alimentos que aumentan la hemoglobina en mujeres embarazadas se incluyen algunas verduras y frutas. Entre las verduras, se destacan especialmente la remolacha, la calabaza y los tomates. Con un tratamiento delicado, la cebolla y las patatas pueden ser una fuente de hierro. Entre las frutas, el producto más popular para obtener hemoglobina en mujeres embarazadas es la granada. Esta fruta es reconocida como una fuente muy poderosa de hierro. Además de las granadas, se recomienda a las embarazadas consumir manzanas, melocotones, kiwis, higos y ciruelas para aumentar la hemoglobina.
En pequeñas cantidades, se recomienda consumir hierbas frescas y secas, así como bayas rojas: frambuesas, arándanos, moras y grosellas negras para la anemia por deficiencia de hierro.
Además de los alimentos para embarazadas para aumentar la hemoglobina, no solo es importante la comida, sino también las bebidas. Así, para la prevención y tratamiento de la anemia, las mujeres consumen jugos de verduras y frutas rojas, como remolacha, zanahoria, granada y otros productos mencionados anteriormente.
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Además de la nutrición, varios otros factores influyen en la composición sanguínea, teniendo en cuenta los cuales se puede evitar la aparición de anemia durante el embarazo:
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