- Lo que determina el género del bebé
- Métodos de planificación
- Diagnóstico genético
- Por ovulación
- Sobre la renovación de la sangre
- Con la ayuda del calendario chino
- Método japonés
- Planificación según la edad de la madre
- Por grupo sanguíneo
- Planificación del sexo en FIV
- Método Freiman-Dobrotin
- Conclusiones
Muchos padres jóvenes intentan calcular si tendrán un niño o una niña. Este deseo es totalmente comprensible. Los cálculos se pueden hacer de diferentes maneras: existen gráficos, calendarios y varias calculadoras para este propósito.
Muchos padres aspiran a conocer el género de su bebé. Algunos quieren una niña, otros un niño, pero la mayoría desea tener la opción de elegir. Para esto, los futuros padres recurren a varios métodos. Algunos de estos métodos no tienen fundamento científico, mientras que otros implican el uso de calendarios especiales.

Lo que determina el género del bebé
Al planificar el sexo del bebé, se debe tener en cuenta que depende del material genético. El óvulo femenino consta de dos cromosomas X, mientras que el masculino tiene cromosomas X e Y. Después de que el óvulo es fertilizado, los conjuntos de dos cromosomas se fusionan. Ya en las primeras etapas del desarrollo fetal se establece la información genética. Como resultado, nace un niño de un sexo específico.
Así que se pueden aplicar diferentes métodos de planificación del sexo del bebé incluso antes de la concepción, pero es importante tener en cuenta que siempre se permite un cierto porcentaje de inexactitud. Conocer el sexo con máxima precisión solo es posible mediante un examen genético.
Métodos de planificación
La planificación del sexo del bebé se realiza de diferentes maneras. Cada uno de estos métodos tiene una especificidad particular.
Diagnóstico genético
El sexo del bebé se puede calcular mediante diagnóstico genético. El procedimiento se realiza durante la FIV. Así, después de la fertilización de los óvulos, se forman embriones. Después de tres días, cuando los embriones consisten en 6-7 células, se estudia la composición genética de una de las células. En esta etapa, se puede determinar qué embriones contienen cromosomas sexuales, es decir, el sexo del futuro bebé.
Existen varios criterios por los cuales este método se considera el más efectivo:
- enfoque científico en la planificación;
- análisis de datos tanto del padre como de la madre;
- aplicación sin depender de factores externos;
- se realiza en laboratorios especializados.

Si el sexo del futuro niño es adecuado para los padres, se realiza la implantación del embrión elegido. Por lo general, el diagnóstico genético se realiza para evitar enfermedades hereditarias relacionadas con el nacimiento de un determinado sexo.
Por ovulación
La planificación del sexo del bebé también se puede realizar según el día de la ovulación. Para controlar la ovulación, se requiere medir la temperatura y elaborar un gráfico. Además, para mayor comodidad, se pueden utilizar pruebas especiales. Este método implica determinar en qué día ocurrirá la ovulación desde el ovario.
Por la duración del ciclo, orientándose en el calendario, es fácil determinar la fecha de ovulación. Si el contacto sexual no protegido ocurre exactamente en la fecha (se permite más o menos un día) cuando se libera el óvulo, lo más probable es que nazca un niño. Debes orientarte por los meses.
Si la relación sucede tres días antes de este evento, los espermatozoides más activos con el cromosoma Y simplemente no sobrevivirán. Entonces se activarán los cromosomas X, lo que resultará en el nacimiento de una niña. Al planificar el sexo del futuro bebé mediante este método, la mejor opción será elaborar gráficos especiales.
Sobre la renovación de la sangre
Se acepta que el niño será del género del padre cuya sangre se haya renovado antes. Esto se calcula fácilmente por la edad de los socios. Pero también se debe prestar atención a las pérdidas de sangre forzadas, como el parto o la donación de sangre.

También hay otra opción que evita los cálculos mensuales. Simplemente se requiere que done sangre el padre del sexo que se desea planificar para el bebé. La opción óptima sería hacerlo tres meses antes de la concepción directa.
El género del bebé también se puede determinar mediante una tabla especial. Esta permite aclarar la probabilidad de que el futuro bebé sea de uno u otro género.
Con la ayuda del calendario chino
La planificación del sexo del bebé ha sido considerada desde hace siglos. Si optas por esta opción, necesitarás una tabla especial. La especificidad de este método radica en que se debe sumar un año a la edad de la madre. Esto se debe a que en China un recién nacido se considera de 9 meses.
El calendario de género chino se puede utilizar realmente para determinar el sexo del bebé. Al planificar según la edad de la madre, también se tiene en cuenta el momento de la concepción planeada.

Será necesario calcular la edad de la madre según el calendario chino. En él, cada mes tiene 28 días.
Método japonés
También existe un método japonés para planificar el sexo del bebé. Para esto, se proporciona una tabla especial. Siguiendo esta tabla, solo queda determinar el número secreto: para esto es necesario indicar tu mes de nacimiento y el mes de nacimiento de tu pareja. En la intersección de estos números, se encontrará ese número secreto.
Luego necesitarás pasar a la segunda tabla. En ella es necesario encontrar el número que surgió en la primera tabla, así como el mes del planificado embarazo del niño. En la celda donde se crucen ambas columnas, se indicará el sexo. Este es un método muy efectivo que permite determinar el sexo del bebé antes del nacimiento en embarazos ya concebidos por meses.
Planificación según la edad de la madre
El método de planificación del género del bebé fue descrito por primera vez en la antigua China. Los sabios estaban convencidos de que el sexo dependía del mes de concepción. También juega un papel la edad de la futura madre. Por ejemplo, una madre de 25 años tiene un 70% o más de posibilidades de tener un niño en los meses de otoño e invierno, y en primavera, una niña. Pero, en el caso de una madre de 24 años, la planificación del bebé es completamente opuesta.
Para facilitar considerablemente los cálculos por edad, incluso se elaboraron tablas especiales. En ellas se indican los meses favorables para concebir un niño o una niña según la edad de la madre.

Como indican los expertos, este método de planificación del género del bebé según la tabla está muy cerca de la verdad. Si se siguen los consejos formulados en la antigua China, se puede aumentar aproximadamente en un 60% la probabilidad de que nazca un bebé del sexo deseado.
Por grupo sanguíneo
Para planificar la concepción y el género del bebé, también se puede utilizar una calculadora especial. Para esto, es necesario conocer el grupo sanguíneo de ambos padres. De hecho, el factor Rh juega un papel especial en la planificación del sexo del niño. Así, si el hombre y la mujer tienen el mismo factor Rh, entonces deben esperar una niña. Si los factores Rh son diferentes, entonces la familia tendrá un niño.
Es importante tener en cuenta que planificar según el grupo sanguíneo no garantiza resultados del 100%. En una familia pueden nacer tanto niños como niñas. Por lo tanto, se puede intentar calcularlo, pero aún existe la posibilidad de que los resultados no coincidan con las expectativas.

Planificación del sexo en FIV
La FIV es adecuada para parejas con infertilidad que no han podido concebir a su propio bebé. De hecho, recurrir a la FIV es a menudo esa oportunidad de tener un hijo propio.
Dado que el proceso de fertilización se realiza en un tubo de ensayo, el médico tiene la posibilidad de seleccionar independientemente el óvulo que contiene el material genético necesario. Este procedimiento se llama diagnóstico genético y es uno de los métodos más confiables de planificación del sexo.
Método Freiman-Dobrotin
Este método fue desarrollado por Mikhail Freiman. Para realizar un análisis completo, es necesario usar 12 tablas. La información sobre la composición de estas tablas no se divulga. Están divididas en 2 grupos: “M” — se consideran los datos del padre, “F” — los datos de la madre. En algunos casos, las tablas del padre se destacan en azul para diferenciarlas más, y las tablas de la madre en rosa. La metodología de Freiman-Dobrotin también prevé calculadoras especiales.

Para calcular correctamente el sexo, se deben seguir ciertas reglas:
- Basándonos en la fecha de nacimiento del padre y el día de concepción, obtenemos el primer coeficiente. Usando la tabla M-1, encontramos el número donde se cruzan estas cifras.
- En la tabla M-2 encontramos la corrección para el mes de nacimiento del padre, y en M-3 para su día de nacimiento.
- En las tablas M-4 y M-5 encontramos las correcciones para el mes y el día de concepción, respectivamente.
- Sumamos todos los números obtenidos anteriormente y encontramos el coeficiente en la tabla M-6.
En las tablas J-1— J-6, de manera similar, se debe encontrar el coeficiente para la madre. Según esta metodología, la pareja tendrá un hijo del sexo del progenitor cuyo coeficiente sea mayor. Si ambos números son iguales a cero, es muy probable que se espere una niña.

Conclusiones
Se puede planificar el sexo del bebé de diferentes maneras. Algunas personas prefieren seguir un calendario especial, otras observan el grupo sanguíneo y el factor Rh, y algunas incluso recurren a calculadoras. Independientemente del método elegido, hay que tener en cuenta que prever el sexo del bebé con un 100% de certeza es prácticamente imposible. La única excepción es el método de diagnóstico genético, que se realiza durante la FIV.
Si estás interesado en la planificación del sexo del bebé y otras cuestiones relacionadas con el embarazo, como la infertilidad femenina, el programa de MomsLab es ideal. Tiene un carácter integral y permitirá preparar no solo el cuerpo, sino también la mente para el inminente nacimiento del bebé.