Las madres jóvenes enfrentan un aluvión de consejos de madres experimentadas y mercadólogos de varias empresas. Sin embargo, algunos consejos pueden ser peligrosos para la salud en ciertas situaciones. Esta categoría incluye la ropa interior ajustada: no todas son adecuadas para todos y no todos los modelos logran el resultado deseado. La ropa interior correctora después del parto es muy individual y se necesita un enfoque correcto para su adquisición.
Dependiendo del efecto deseado, las mujeres utilizan diferentes tipos de ropa interior ajustada para el abdomen después del parto:
No se puede dar una respuesta universal a la pregunta de si se puede usar ropa interior reductora después del parto. El hecho es que cada caso debe considerarse individualmente, teniendo en cuenta varios factores: el método de parto, el progreso de la recuperación, las enfermedades presentes y complicaciones, y la duración del período posparto.
Para saber si se puede usar un corsé, body y ropa interior de compresión después del parto en una situación específica, es recomendable consultar con su médico o con los especialistas del curso en línea.
Las contraindicaciones definitivas para usar ropa interior de compresión son:
Los médicos que reconocen el beneficio de la ropa interior de compresión después del parto consideran permisible comenzar a usarla después de 10 días. Sin embargo, solo se puede hacer después de un examen y con la autorización del médico, quien descartará patologías y contraindicaciones para tales procedimientos.
Si después del parto surgen algunas complicaciones o enfermedades en el organismo que son incompatibles con el uso de fajas, ignorar las contraindicaciones puede empeorar la situación. Debido a que la presión externa ejercida por la ropa correctora disminuye el tono de los músculos ya debilitados, el uso temprano de dicha ropa puede provocar un período de recuperación más prolongado.
En primer lugar, uno debe decidir qué tipo de faja utilizar. La mayoría de las mujeres suele optar por un corsé abdominal postparto, ya que corrige las zonas más problemáticas. Hay una menor necesidad de bodis y calzones reductores, por lo que entre la ropa correctora postparto tienen menos demanda.
La escala de tallas de la ropa interior moldeadora no coincide con las gradaciones de la ropa superior y la ropa interior habitual. Se puede pedir ropa interior correctiva en tallas de 1 a 6, que corresponden a tallas estándar de 42-52. Por lo general, si no ha habido un aumento significativo de peso después del parto, la mujer puede adquirir ropa interior de la misma talla que antes del parto.
Aunque la ropa interior correctora pertenece a la parte inferior del vestuario, está permitido e incluso es obligatorio probarla. Al elegir un modelo, es importante asegurarse de que la ropa sea cómoda de usar, que no apriete en ningún lugar ni oprima.
También se debe prestar atención a la composición. Dado que la ropa interior moldeadora está en contacto directo con la piel, es mejor elegir un modelo que contenga al menos un 30% de algodón.
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